Sirva esta introducción como adelanto al libro EL PERDÓN que saldrá a la venta en los próximos días. Se acercan esas maravillosas fiestas donde nos reunimos con nuestros padres, o recordamos su ausencia. Qué momento perfecto para iniciar el camino del perdón.
“El perdón está ligado a reconocer tu esencia divina. Tu esencia previa a todo. Es identificar para siempre tu Yo, ajeno a tu alrededor, a lo que hacen los demás, a lo que has vivido, al dolor o la alegría.
El rencor está conectado a tu identidad familiar. Es quizá esto lo más duro que vas a encontrar en este libro. Seguramente estás pensado que vas a tener que analizar a tu familia para perdonar a alguno de tus progenitores, comprender su esencia maligna y disculparla. Te has equivocado.
Vas a ir a tu encuentro familiar, aunque en ningún caso para revisar las maldades o bondades de aquellos a los que tuviste la suerte de encontrar para darle sentido a esta vida. Tu existencia recibe un sentido específico gracias al lugar del que procedes, junto con otras variables que están contempladas como una repetición de tu origen.
Seguramente descubrirás cosas que pasaron, para identificar la utilidad que tuvieron para ti. Este libro quiere que retomes el conocimiento de que tú eres el artífice de tu destino, tanto para alcanzar el perdón, como para sumirte en tu rencor.
Rencor y perdón conviven en ti con la misma fuerza y con la misma intensidad. El primero está asociado a tu crecimiento y los obstáculos que has percibido, y el perdón a tu origen vital y el aprovechamiento que tu le das día a día.
Tienes todo el rencor que has podido acumular en tu negación a aprender. También tienes tanto amor personal como hayas activado tu potencial y lo hayas compartido con tu entorno, agradeciendo a la persona que te lo muestra para que recuerdes que es tuyo y viene de mucho más allá.
Piensa si este proceso te resulta atractivo. Vas a caminar por un sendero que, siendo sencillo y rápido, te llevará a transitar por zonas que tu has inundado de piedras, de grietas y de dificultades. Habrá momentos en los que el camino será ligero y fluirás. En otros instantes notarás que los pies se niegan a andar y tus fuerzas se minimizan. Recuerda que tú haces el camino fácil, y tú lo enredas.
En realidad, solo existe tu potencial y un sólo aprendizaje que se hace continuo en la vida. Cuando hay una negación al aprendizaje, el potencial va mermando y la mente se inunda de recuerdos. Todos ellos giran alrededor de un mismo tema y en realidad podríamos decir que tienes un miedo o un enfado que se muestra a través de diferentes imágenes o recuerdos. Muchas de estas imágenes tienen tanta fuerza que marcan los hitos más importantes de tu vida, haciendo de la vida un martirio.
Cabe que te hagas las siguientes preguntas:
¿Qué sería de tu vida si en vez de mirar el lado oscuro mirases el lado de luz?
¿Qué pasaría si en lugar de centrarte en lo que no tienes agradecieras todo lo que tienes?
¿Qué sería de ti si en vez de juzgar al padre que no te ha gustado, pensaras en el que te lo ha dado todo?
Este libro va de eso, de fijar la vista en lo que eres y abrirte a aprender lo que admiras, venciendo el miedo a quedar en evidencia y que puedan dejar de quererte.
El trabajo del rencor te conmina a recordar situaciones de resentimiento y a buscar la disculpa o el entendimiento de estas, revisión que te sume nuevamente en el dolor y te aleja de tus metas.
Actuar para vivir en el perdón es necesario e imprescindible si quieres avanzar en el propósito de tu vida y sentirte libre, más allá de lo que otros “te hicieron” y de todo bloqueo. La propuesta de este libro es buscar actuaciones que, estudiadas desde ti mismo, impidan que llegues a activar el resentimiento o el rencor.
Activarás una mirada al sentido trascendente de tu vida, que va más allá de lo que te han hecho, y que te permitirá decidir para lograr las metas más elevadas en tu relación con los demás.
Perdonar es una decisión de vivir en la luz. Es necesario decidir porque negarse al perdón indica miedo, cobardía, necesidad de vivirse separado e infeliz. En sí mismo el perdón habla de la purificación de la mirada, de la elevación de la conciencia, de trascender las emociones limitadoras. Perdonar es ante todo fijar la visión en todo aquello que te ha conformado y construido. Para llegar a este modo de vivir, sentir y pensar es imprescindible revisar minuciosamente tu pasado.
Perdonar es una decisión de volver al Padre. Es urgente decidir. Primero porque negar el perdón indica miedo, separación, cobardía. En sí mismo el perdón habla de la purificación del Ser, de la elevación de la conciencia, de trascender el miedo, la culpa y la eliminación del dolor. Después, porque decidir perdonar es ante todo conocer, descorrer los velos del pasado y llenarlos de luz. Para perdonar es necesario hacer un minucioso examen de la mente.
Este examen el ego dice que precisa analizar todo lo que no funciona, lo que te hace daño, lo que te han hecho o en lo que tu te has equivocado.
Este taller quiere darte pistas para vivir desde el perdón cada día y disfrutando de ser quien eres, abierto a compartir con los demás lo mejor de ti.
Perdonar es hacer aquello que te satisface y no repetir actuaciones que te hayan hecho daño o que tú consideres que te podría molestar si te lo hicieran a ti”
Este es un primer boceto de la portada:
