38 Motivación

Es una de las pocas veces que paseamos por la calle sin rumbo. Me va contando el caso de una persona que fue a verla y le planteó un cambio radical en su profesión, porque le faltaba algo. Había perdido la motivación.

Jon: ¿Qué es para ti la motivación?

Joaquina: Es el impulsor que te lleva a hacer algo. Pero previo a la motivación están los valores, y están las creencias. Cuando consigues estar unido a tus valores y a tus creencias, la motivación surge.

Jon: Así que la motivación a priori es un resultado.

Joaquina: Cuando, por alguna causa, pierdes tu motivación a lo largo del día, casi seguro que piensas que es transitorio, y que en realidad no te está pasando nada. Sin embrago, cada vez que una persona tiene un sentimiento de carencia, se empieza a producir un sentimiento de “no puedo”, “no valgo” y “no merezco la pena”. Esto a priori parece que es muy normal y que nos sucede un ratito y que después se va. Sin embargo el calado que tiene el “no puedo” es que conecta directamente con pérdida de un valor que yo tenía como real dentro de mí, yo tenía un valor que me permitía decir que puedo y sin embargo ahora estoy diciendo “no puedo”.

Jon: Estás uniendo dos términos que no parecen cercanos: carencia y motivación.

Joaquina: Ahora llego a eso. Cuando surge la desmotivación, lo primero que has hecho es una desconexión inmediata de tus valores, y no importa si esos valores son muchos o pocos, has desconectado.

Jon: Vale.

Joaquina: Lo siguiente es que cuando piensas “no valgo”, has empezado a generar una creencia de que hay algo en ti de que no vale socialmente, que no se identifica con lo que pasa en los demás, que hay algo de tu prestigio que empieza como a resquebrajarse. Y es importante que sepas que el “no puedo” y el “no valgo” van juntos. Empieza uno con el no puedo, y pasa con mucha rapidez a sentir que lo que está haciendo no vale.

Jon: Si, como pensando “no sé qué hago en este punto, seguramente tendría que cambiar, no funciona lo que estoy haciendo”.

Joaquina: Y el último, que es lo importante, “no merezco la pena”. Es decir, estoy despropositada/o. Mi vida no tiene un propósito verdaderamente real. ¿Cuántas veces te pasa al cabo del día?

Jon: Antes casi de continuo. Ahora rara vez.

Joaquina: Cuando te pasa, te das cuenta de que vas perdiendo movilidad, creatividad, que empiezas a perder conciencia del yo. Así, empiezas a debilitar las estructuras, y empiezas aparecer algo que no notas, que se llama tristeza. El ser humano no está preparado para sentirse carente, ni está preparado ni posiblemente lo vaya estar nunca. Lo que sucede es que cuando empiezas a perder la motivación no te das cuenta de que esa carencia era previa a tener problemas de motivación. Esa carencia estaba ya soterrada dentro de ti y no has trabajado por ello.

Jon: ¿Siempre es una carencia específica?.

Joaquina: Hay tres tipos concretos de carencia que tienes que revisar: La carencia económica: la mayoría de nosotros estamos sujetos a una necesidad mínima o máxima de dinero y lo tenemos en nuestros valores. Por lo tanto aquí tienes que ver tus valores en relación al dinero, y las creencias que tienes en relación al dinero. Y siempre que no se cumplan estas dos estarás desmotivado.

Jon: Te refieres a que si yo tengo una creencia de que mi valor económico para que yo pueda vivir plácidamente son 1.500 euros, y estoy ganando 1.000 euros, tengo un problema.

Joaquina: Sí, el mismo problema que si piensas que deberías ganar 100.000 y solo metes 90.000. No es cuestión de cantidad, es una cuestión de criterio intangible, está dentro de tu cabeza. Si piensas que eres rico, piensas que eres ricos. Y si has nacido para ser rico, piensas que has nacido para ser ricos y es no es cuestionable.

Jon: Entonces la desmotivación no es lógica, no se sienta contigo y te dice: pero pedazo de animal, tienes 90.000. “Es que creo que debo tener 100.000, tengo una carencia de 10.000”, contestas. A lo que voy es que no es una cuestión de razonamiento y de sentarte y decir: “pero por favor…”.

Joaquina: Es una cuestión de que entiendas qué significa carencia, y cuáles son los significados de la carencia en tu sistema interior, y tienes que descubrirlo y ver las opciones para resolverlo.

Jon: ¿La siguiente carencia?

Joaquina: La siguiente es la carencia afectiva. No tiene nada que ver con si me acuesto o no con alguien, si tengo un chico que me quiera, o no tengo un chico que me quiera. Tiene que ver con el prestigio emocional. Tiene que ver con que yo tengo una marca. Tiene que ver con que yo sea reconocida. Tiene que ver con un montón de cosas, además de tener un novio/a, o tener a alguien. Va mucho más allá. Tiene que ver con los valores que yo le doy a ser aceptado en la sociedad y con la creencia que yo tengo en relación a mi prestigio.

Jon: Es decir, que si yo creo que realmente mi prestigio se basa en tener una novia de un tipo y no la tengo; tengo un problema. Si mi prestigio se basa en tener una pareja y no lo tengo, tengo un problema. Si mi prestigio se basa en que me llamen tres agencias o 400 personas, o tener una casa de un tipo, o lo que sea y no lo tengo, tengo un problema.

Joaquina: Esto no es cuantificable, es emocional. Y aquí está la casa, aquí está el coche, aquí está la ropa, aquí está el tipo, cómo soy yo, si estoy gordo, si estoy delgado. Media chichilla que me ha salido aquí, es decir, que ya no valgo para nada, me tengo que suicidar, por favor mátame, no importa.

Jon: Ahora métele la lógica a esto.

Joaquina: No existe la lógica, no puedes hacer nada para tener lógica, porque la carencia tiene que ver con un sustrato que está en el inconsciente y sobre el que nosotros no podemos trabajar.

Jon: Por lógica, jejeje, ahora llega la carencia intelectual, ¿no?.

Joaquina: La carencia intelectual en muchos casos no es ser inteligente, sino ser más inteligente que la persona que está a lado. El de al lado es un torpe, pero tú eres un poco más inteligente y ya te has quedado satisfecho. Con la carencia intelectual vuelve a pasar lo mismo, tengo unos valores de lo que es inteligencia. Tu por ejemplo valoras la intelectualidad como inteligencia, eso quiere decir que se pueda razonar, que se pueda hablar, que hablas de un tema o de un libro y te entiende… Por lo tanto desde tus valores la inteligencia no es lo mismo que una persona que piensa que inteligencia es ganar dinero sustrayendo aquí y allá y en el otro lado. Porque está la inteligencia del gitano, que es maravillosa, que es haber por donde rampo. Y está la inteligencia intelectual, es el valor que tú le das a tu inteligencia, no es el valor que le dan los demás. Si tienes unos valores de inteligencia que no cubres, tienes un problema, y si crees que no ser inteligente te va a traer complicaciones, también tienes un problema.

Jon: Entonces se trata de saber en cuál de las tres carencias estoy atascado.

 

Joaquina: Seguro. Pero tienes que darte cuenta de la que realmente es relevante para empezar a perder la motivación. Y aunque te duela, es la carencia económica.

Jon: Yo habría dicho que tengo mas carencias emocionales que económicas.

Joaquina: Después de 28 años de trabajo he visto a gente sufrir intelectualmente bastante, he visto a gente sufrir por el prestigio y resolverlo más o menos, pero he visto hundirse literalmente a las personas por las necesidades económicas. Y no porque no tengan dinero, que lo pueden tener, sino porque sienten que no pueden vivir algo que para ellos es imprescindible. Puede ser un viaje, puede ser tener una casa, puede ser tener la libertad para poder comprar la comida que les gusta…

Me viene a la cabeza la arquetípica cita de Woody Allen: «El dinero no da la felicidad, pero procura una sensación tan parecida, que necesita un especialista muy avanzado para verificar la diferencia».

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s